El vecindario levantó, un eremitorio a la imagen de Nuestra Señora de Los Ángeles.
Que trata de la invención de la Santa Imagen de Nuestra Señora de los Angeles, de la fundación de su Iglesia y Convento que hubo en ella de Frailes Franciscanos. Nos dice:
“… A un cuarto de legua al Norte de la ciudad y en lo alto de un montecillo lindante con el llamado Pla de Bon Repós, se encuentra la Iglesia de Ntra. Sra. de los Angeles. Ocupa la Iglesia, casa y huerto, todo lo alto del montecillo; debió ser ermita primero y antes que los godos perdieron a España, donde estuvo la Virgen que hoy gozamos, a la cual los cristianos de entonces, viendo la tiranía de los moros,... y pensando que éstos durarían poco en la Península, no tuvieron otro remedio más a mano que enterrarla.
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B
endicho, después de hacer constar que se ignora el año del hallazgo, da cuenta de él, diciendo que “… así que a lo que quiso el leñador tirar el golpe a desmontar un pie de un pino, que estaba cercado de malezas, halló la imagen de la Virgen, y después de adorarla la cubrió de nuevo, dejando una señal, y vino a la ciudad a dar cuenta de la nueva...”. Fueron allá algunos eclesiásticos y otras personas de abono, y comprobada la verdad, determinaron se quedase la imagen santa en el mismo lugar donde fue hallada, que es el montecillo donde hoy está; y que se le edificase casa, como así se hizo, porque fuese Santuario de esta ciudad, donde es tenida en muy grande veneración; y la tienen por Patrona, pues la llevan en su Real Pendón de damasco carmesí, que es el que lleva el Justicia, a quien asiste la ciudad en las procesiones generales de las festividades del Corpus Christi y Asunción de Ntra. Sra. Está bordada en seda y oro, con muchos ángeles alrededor. (sigue aquí la descripción de la pintura y otros pormenores).
Es la Iglesia donde se reverencia esta imagen de la Virgen muy antigua, de una sola nave, pero baja de techo; tendrá de largo 100 palmos y de ancho 33. Son, sin la capilla mayor, cuatro sus bóvedas, con arcos de piedra cruceros, con algunos altares por los lados... Además de esto, esta la capilla mayor, muy espaciosa y ancha, con su media naranja que funda sobre sus cuatro arcos, y por remate, una linterna que da luz a toda la Iglesia, obra moderna... Fue el artífice, el maestro Miguel Sánchez, hombre sencillo y diestro en su arte; sería por el año 1606. A Mediodía de la Iglesia, hay un patio que fue claustro del Convento; y a Levante, el huerto y el oratorio de aquél (es de suponer que ambos en ruinas, pues los frailes debieron haberse trasladado ya a San Francisco, y el oratorio no se sabe qué oficio desempeñaba, no habiendo frailes y existiendo Iglesia nueva).
Fue aquesta casa ermita, hasta que en los años 1440, Alfonso V de Aragón, con particular concesión de Eugenio IV, la erigió en Convento de frailes Franciscanos de regular observancia... Advierto que en la concesión de Eugenio 4.º daba facultad para fundar en el Reino de Valencia el Convento de Sta. María de Jesús, extramuros de Valencia; Nuestra Señora de Gracia, de la de Alicante, y otras tres donde el Provincial señalase. Alfonso V, además, mediante privilegio de fecha que no consigna Bendicho, puso bajo el real amparo el mencionado convento (cuya fecha de construcción no consigna aquí Bendicho). En él vivieron los frailes hasta que, por estar lejos de de la ciudad el sitio de que se habla, se pasaron a fundar el Convento de Nuestra Señora de Gracia en el Raval de aquesta ciudad.
A la relación de espacios realizada por Viravens hay que añadir la existencia de alguna otra dependencia, entre la cocina, la sacristía, la murallas, etc., por otra parte las laderas del monte han sido parcialmente desmontadas en el transcurso de los años. De esta manera han desaparecido algunas de las estructuras del antiguo cenobio, o bien las que han llegado se encuentran muy dañadas. Endicha situación está la construcción que por sus características podemos identificar como una muralla. Se aprecia bordeando a sur y levante la construcción principal.
En efecto se trata de un muro de mampostería irregular, del que se conserva poco más de la cimentación y las primeras hiladas. Su planta se desarrolla en dos alienaciones que describen ángulo recto. Ofrece la sección horizontal o espesor de casi un metro, dimensión muy superior a los que se aprecian en los restantes muros constructivos que se encuentran en el edificio. Además en la esquina sudeste se encuentra un saliente macizo a modo de torre, elemento conveniente para la defensa estática del lugar.
Es la Iglesia donde se reverencia esta imagen de la Virgen muy antigua, de una sola nave, pero baja de techo; tendrá de largo 100 palmos y de ancho 33. Son, sin la capilla mayor, cuatro sus bóvedas, con arcos de piedra cruceros, con algunos altares por los lados... Además de esto, esta la capilla mayor, muy espaciosa y ancha, con su media naranja que funda sobre sus cuatro arcos, y por remate, una linterna que da luz a toda la Iglesia, obra moderna... Fue el artífice, el maestro Miguel Sánchez, hombre sencillo y diestro en su arte; sería por el año 1606. A Mediodía de la Iglesia, hay un patio que fue claustro del Convento; y a Levante, el huerto y el oratorio de aquél (es de suponer que ambos en ruinas, pues los frailes debieron haberse trasladado ya a San Francisco, y el oratorio no se sabe qué oficio desempeñaba, no habiendo frailes y existiendo Iglesia nueva).
Fue aquesta casa ermita, hasta que en los años 1440, Alfonso V de Aragón, con particular concesión de Eugenio IV, la erigió en Convento de frailes Franciscanos de regular observancia... Advierto que en la concesión de Eugenio 4.º daba facultad para fundar en el Reino de Valencia el Convento de Sta. María de Jesús, extramuros de Valencia; Nuestra Señora de Gracia, de la de Alicante, y otras tres donde el Provincial señalase. Alfonso V, además, mediante privilegio de fecha que no consigna Bendicho, puso bajo el real amparo el mencionado convento (cuya fecha de construcción no consigna aquí Bendicho). En él vivieron los frailes hasta que, por estar lejos de de la ciudad el sitio de que se habla, se pasaron a fundar el Convento de Nuestra Señora de Gracia en el Raval de aquesta ciudad.
A la relación de espacios realizada por Viravens hay que añadir la existencia de alguna otra dependencia, entre la cocina, la sacristía, la murallas, etc., por otra parte las laderas del monte han sido parcialmente desmontadas en el transcurso de los años. De esta manera han desaparecido algunas de las estructuras del antiguo cenobio, o bien las que han llegado se encuentran muy dañadas. Endicha situación está la construcción que por sus características podemos identificar como una muralla. Se aprecia bordeando a sur y levante la construcción principal.
En efecto se trata de un muro de mampostería irregular, del que se conserva poco más de la cimentación y las primeras hiladas. Su planta se desarrolla en dos alienaciones que describen ángulo recto. Ofrece la sección horizontal o espesor de casi un metro, dimensión muy superior a los que se aprecian en los restantes muros constructivos que se encuentran en el edificio. Además en la esquina sudeste se encuentra un saliente macizo a modo de torre, elemento conveniente para la defensa estática del lugar.
La iglesia es perfectamente reconocible en la nave única. Destaca la existencia de pavimento de barro cocido, del que se conservan algunos metros y las huellas de aquellas piezas que se han ido desprendiendo. Junto al lado sur de la iglesia se sitúa el patio, es de pequeña superficie y se encuentra rodeado por un andador que define al claustro. La separación entre ambos espacios debió ser un muro, a juzgar por los restos más o menos calado mediante huecos de diversas superficie.
En el centro del patio de encuentra el aljibe y las canalizaciones que llevaban el agua desde las cubiertas. Por otra parte se encuentran los restos de algunas acequias, también la cocina, enterramientos y restos de distintas dependencias. Los muros ofrecen distinto grado de conservación y las alturas son diferentes. Se conservan distintos umbrales y el alféizar de distintas ventanas. Aunque escasos se conservan restos de algunas impostas y las dovelas de arcos con sección característica de formas góticas. La intervención arqueológica llevada a cabo entre noviembre de 2002 y febrero de 2003 ha permitido definir los espacios conventuales y su identificación funcional relacionada con la Ermita previa a la fundación del Convento.
La Ermita se situaba en lo alto del cerro, muy transformada por la construcción posterior del convento, cuyas construcciones anularon el espacio religioso subdividiéndola, cambiando la funcionalidad del espacio. Contaba la Ermita con planta rectangular, orientada con la cabecera al sur y los pies al norte, dotada de banco corrido en tres de sus paredes y con dos criptas de enterramiento a los pies. Quedó integrada en el conjunto conventual, a la derecha de la Iglesia y al oeste del claustro.
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- AUTOR DEL ARTICULO: Manolo Serrano
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